El final de los toros

Siento haberme adelantado unos días, y dejar claro que los toros en la ciudad de la Concha iban a desaparecer el próximo año. En principio no va a haber encuesta para la continuidad o no. Y eso incumple el planteamiento de Bildu en este tipo de prohibiciones, porque se dejó claro que sería el pueblo el que decidiera. Alguno me dice que, después del resultado de Zestoa, no se pueden arriesgar a otro fiasco. Yo no lo veo así. Si tanto hay que pelear por el pueblo, o hacer por el pueblo, Bildu ningunea al pueblo en esta ocasión. Ahora bien, si la consulta va a ser decidida en el Ayuntamiento por los grupos edileros elegidos por el pueblo para que en cuatro años se olviden de él, vamos dados. Ahora mismo les doy el resultado:

- Bildu y Aralar NO
- PP y PSE       SI
- PNV              Abstención

Resultado: No hay toros.

¿Hasta cuando?
Hasta que el pueblo vaya a las urnas, y se vuelva a elegir composición del mismo.

Pregunta:
¿Llevarán algún partido de los del sí o la abstención el reabrir la plaza para los toros, o el porqué de su habitual lavada de manos 'pilatera' en su ideario político?

Bildu ya llevaba el NO a los toros, me dicen.

A un amigo le parece gracioso que les dé pena la sangre o la barbarie de un toro en la plaza y estén con los del tiro cobarde a la nuca. No opino.  Simplemente dejo esa idea tan extendida, porque deben estar todas.

¿Es una cuestión antiespañola? Espero que no, porque como se les ocurra a todos hacer política, con portadas tipo ABC, igual la peña de Donosti vota que NO para siempre. Otros comentan que la ciudad es muy tradicional y española como para perder la Fiesta Nacional. Y eso hará enfrentismo de nuevo, con algo que no debiera ser propiedad de nadie, salvo del espíritu de aquellos que quieran ser sus seguidores.
Si se va a hacer como batalla de banderas, una vez más, el negocio tiene mala pinta, y el rito tendrá mucho que perder. Aunque, amigos y conocidos tienen claro que igual es la única forma de hacer reaccionar a mucha gente de la calle, que pasa de los toros, que está hasta los c... de Illumbe, o de lo que le han contado sobre su ruina y demás, y que si es cuestión de banderas se pondrían a favor de la 'fiesta española'.

El PNV se abstendrá, seguro. Y uno se cuestiona esto de los toros por todos los lados. Un PNV que en Bilbao abandera la feria de Vistalegre, y que ¡seguro! en Donosti quitará la vista al estilo CIU o PSC en Barcelona.

Bien, como mucha gente entiende esto como un anacronismo, y encima, la ignorancia y el desconocimiento del mundo rural les hace decir estupideces y soplapolleces que soflaman cuatro 'antis' a los cuatro vientos, y que se están haciendo con el negocio de la destrucción animal, creo que no se puede hablar de cuestión de banderas. Sólo me dicen el tema de la eliminación de lo español los que defienden la fiesta como algo español. En muchos lugares y tierras en Euskadi, Navarra, Navarra Baja, Lapurdi, Zuberoa, Bearn, Landas... hay aficionados a los toros, y no les interesa la roja y gualda, o la del gallo, o la seudo UJ (Union Jack británica). O hay otra mucha gente que no les interesa para nada, y tampoco piensan que es porque es español.

Hay que admitir que hay gente que no le gusta el rito. ¡Estupendo! Peor para ellos. Pero qué tal, si nosotros unimos fuerzas, explicamos y enseñamos la realidad de lo que defendemos, con la Verdad de lo que amamos, lejos de los profesionales, mangantes y mangones, trincones y trincadores cortoplacistas, pensando en las futuras generaciones, y no en el goce de mañana? ¿Sería o no interesante?
Aquí está el quiz de lo que ocurre. Nadie piensa en el mañana. Todos en hoy. Unos en qué se torea, qué toros peores o mejores queremos, otros en la babosa cómoda y llevarse la guitarra, otros en cuánto pillo y qué poco pago para llevarme el cocido entero, otros en el goce ya, otros....

Decía Churchil que la diferencia entre un político y un estadista era su visión. El político sólo miraba para mañana cuando el estadista estaba enfocando lo posible para las siguientes generaciones. Y así, en el toreo, todo profesional es político o funcionario, sin miras, los gobernantes que gestionan y rigen este negocio, aun son más cortoplacistas, ya que lo tratan como un negocio. Los medios, verdaderos chupapollas, adláteres del poder, en su mayoría, están a lo que les dicen. Y el aficionado, los pocos que quedamos, dando bandazos de esquina en esquina, más perdidos que un cartero en Barcelona.

Sólo nos queda un vía a todos los aficionados. Lo primero es 'hacer de tripas corazón' y unirnos todos. No hay fórmulas, pero una sería estar asociado a algún tipo de peña, club o junta taurina. Después dar consentimiento con DNI y firma de cada uno en crear una asociación estatal, tipo federación, tipo grupo de presión, como sea que se decida, respondiendo a una sola voz con el nombre de todas esas personas. Y de ahí, primero dar por saco a los políticos, y después a merendarnos a los profesionales... A obligarles a defender el rito, a echar al infame, al chorizo, respetar a que lo haga, trabajar con el que quiera, crear comisiones de limpieza, crear un canal temático independiente y libre, sin ánimo de lucro, bombardear a los medios reacios, sacarlos a la palestra y ningunearlos.

Cuando digo de tripas corazón, hablo muy en serio. Un Kaparra junto a un Chili, codo con codo. Y ese es el único camino que nos queda.
Y si no, ni El Juli regalando entradas, el día más fuerte se llena Bilbao. Porque un lunes de fiuenteymbros no ver media plaza es de vergüenza. Y eso en lo que los profesionales dicen una de las tres principales. ¿A dónde vamos a ir a parar, si de esas tres, en dos no se llena ni en feria principal? Que ciudades como Sevilla o Bilbao, con el doble de población que la que habitamos mi tierra no sea capaz de llenar doce mil localidades es para mirárselo. Es de psiquiatra. Pero, los mandones, los que se lo llevan, ya lo miran: suben el precio de la 'butaca', bajan la calidad del enfrentamiento, bajan los emolumentos a los toreros, y a los ganaderos les pagan lo de hace veinte años, o menos. Todo sea porque ellos sigan llevando el bolsillo lleno. Que si no, esto del toreo se viene abajo. Y eso es ser político y funcionario y pensar para hoy. Nunca para pasado mañana.

Y como la solución solo la tenemos los que debemos mandar, es decir, los tontos que pagamos espectáculos y ferias infames con nuestro dinero, en vez de ver un rito que tenga verdad y emoción, o nos ponemos en marcha, o preparémosnos para ver el final de los toros. Y esta vez, no es como siempre se ha dicho que esto se acababa, o que viene el lobo. Esta vez sucede algo que no pasaba antes. Y es que ahora vivimos en el mundo del instante, de la información (buena o mala) al segundo, el de la globalización. Y todo lo minoritario, o controvertido está abocado a su temprana desaparición. Y nosotros entramos en esa bolsa, mientras el enemigo, fuerte y organizado, se frota las manos.

PD. Ya he firmado para la entrega de firmas de Toros en Donosti SI. Sé que para nada van a servir. Y también imagino que si sirvieran, serían para seguir manteniendo la mala gestión. Y sin embargo, como correligionario de mi fe, mi deber es cumplir con lo obligado.