Todos los años los premios reciben aplausos y broncas según sea el personal. Pocas veces la situación es unánime, aunque, dicho sea, se suele dar. Sobre todo cuando hay poco que debatir porque apenas se ha visto cosas, o porque algo ha sobresalido en exceso del resto.
¿Y este año? ¿Cómo han ido las cosas? La verdad, no muy bien. Y digo esto, porque hay guerra de declaraciones entre aficionados y critica, como la que pueden ver Vdes. En la web del club taurino de Pamplona, www.clubtaurino.es. Otras surgen contra uno, contra todos, y en lo que me toca, no voy a entrar en guerra en foros, ni webs, pero sí voy a dar mi opinión aquí, en mi casa, en mi blog, donde todo el mundo puede decir lo que quiera porque no está restringido, y por eso, sólo por eso, yo también puedo hacerlo.
Empezamos por los bípedos. De los muchos premios que hay, un menda está en dos: premio al triunfador de la Feria, premio Diario de Navarra, y premio a la faena más artística, premio Hotel Maissonave. Vaya por delante que sé poco de esto, porque no he dado una en ninguno de los dos. Y así se cumple la máxima que la afición y la critica ven cosas diferentes. O que nos creemos unos listillos, y queremos saber más que los aficionados. Que todo puede ser.
Premio Diario de Navarra al Triunfador de la Feria: IVÁN FANDIÑO.
Por lo tanto esta imagen se volverá a repetir, pero así como en ese instante estaba dando los nombres del Jurado y su voto por unanimidad el pasado año, este no ha sido así. Siete personas en el jurado, que para las cuatro de la tarde del día 14 no se ponen de acuerdo, pero hay una mayoría de cuatro que deciden a este matador como triunfador, y que a la noche, después de la corrida de Miura, siguen reafirmando su voto. Dos personas votamos a Miguel Ángel Perera, porque a mi me dijo más el pacense el día 11, capaz él solito de levantar una tarde blanda y sin fuerza, que lo que había hecho Fandiño. Y añadir que en este premio, y debido a las presidencias, nunca se suman las orejas. El séptimo en discordia, Koldo Larrea, a quién nombro por estar ofreciendo su versión en la web citada anteriormente, nos dijo a tres miembros del jurado a mediodía, que no tenía a nadie, y que habría que esperar si alguien le hubiera interesado en la tarde del 14. Por tanto su voto se contó como desierto. Por la tarde el buen hombre ni llamó para preguntar o decir nada. Vio Fandiño y se mosqueó, y no se da cuenta que cuatro votos pueden más que tres, aunque a posteriori se lo dé a Esaú Fernández. Y decir que los cuatro votos son de aficionados, toreros retirados, asesores, gente con más de doscientos años de experiencia y afición entre los cuatro. Gente contrastada, bastante más que los que nos quedamos en la otra orilla. Y como no entiendo, y como escriben que el único que pertenece a ese periódico no sale lo que él dice, después de 15 años, este ha sido el último en que salgo en este jurado.
El premio a la faena más artística, premio Hotel Maissonave: MIGUEL ÁNGEL PERERA
Aquí me quedé aún más sólo. Tres votos a Miguel Ángel Perera por el quinto del día 11 de nombre Camelador. Hubo un voto para Fandiño con el quinto de Victoriano, y un propio, que votó por Perera como triunfador porque estuvo muy bien con sus dos toros, primado en ambos la estética y la entrega, pasó siete minutos de faena atornillada, con tres naturales increíbles, con la boca abierta ante lo que hizo Pepe Moral a otro quinto. Al quinto blando y sin fuerza de Fuente Ymbro, al que llevó ligado sin moverse de un metro cuadrado diecisiete pases con ambas manos, con sus descansos preceptivos. Y como lo conté así en la radio, así me salió del corazón. Y si alguno de Vdes. me ha seguido diariamente, se dará cuenta que estos tres momentos, con estos tres quintos toros, fueron reseñados por mí en vivo y en directo. Y algunas cosas más que no han recibido su premio, y debieran haberlo tenido.
El club taurino y sus jurados han otorgado el mejor par a Curro Robles en el sexto de Miura por Olivito, que me parece merecido. Había dos pares más a señalar, pero este tenía más enemigo y eso cuenta, y mucho.
El premio al mayoral que trae el toro más bravo a Miguel de Victoriano del Río por Español, que puede ser. Pero he visto hasta tres toros que me han dicho más a mí.
El premio a la vara desierta un año más, y yo, que desde la radio cuento en directo y atentó cada segundo de feria, se la hubiera dado a Óscar Bernal, por la segunda vara al tercero de la tarde el día que iba con su matador Juan del Álamo. Sinceramente, fue perfecta en ejecución, y así la canté. Pero es lo que hay. A veces nos creemos en posesión de la Verdad, y no es así. Como todos, opinamos, y nos equivocamos. Yo soy hombre de hechos, de acción, de aprendizaje diario, y de pasión por todo lo que hago. Y, ó soy tonto porque siempre veo algo interesante en las plazas del mundo, o realmente estoy tan mal que quiero hacerme notar por encima de los demás.
Y ya los premios que parecen escocer a algunos críticos, o a muchos aficionados, son los de la Meca. Esos premios que ofrece la Casa de Misericordia, que son el Feria del Toro a la mejor corrida, y el Carriquiri al mejor toro, y que se han quedado en Guadalix de la Sierra en exclusiva, porque también el toro quinto Español, 112, lidiado por Iván Fandiño ha sumado el Carriquiri, al feria del Toro en conjunto junto a sus hermanos de camada.
Lo primero ¡enhorabuena! A la casa Del Río Cortés.
Y luego a dar opinión. Porque si me preguntan a mí, posiblemente el feria del Toro sea así, pero el Carriquiri no. Me hubiera quedado más sólo que la una, otra vez. Recuerdo cuando el Dr. Purroy me llamó un año para presentar unas ponencias en la Universidad, sobre Ganado de lidia, y me tocó la nada desdeñable tarea de escribir sobre la bravura, algo tan etéreo y diferente según preguntes a una persona u otra, y como allí quedó de manifiesto entre profesionales y aficionados. Está claro que sigo sin entender este concepto, por tanto, aquello que escribí y debatí queda más que superado. Si recuerdan en algún poste anterior comenté que le dije a Fandiño que había hecho un flaco favor dejando tan crudo a ese Español, porque pensaba que se le escapaba el Carriquiri sólo por eso, o porque con unas varas en su justa medida igual el toro ya no servía. Pero si me han leído o me han oído diariamente, creo que lo tienen muy claro. Y para mi el toro más bravo fue el que intentó matar el Jabato por orden de su miedoso matador, el Finiquito de Córdoba, y que no sólo no pudo, porque aguantó como un bravo, y luego se movió, y hasta le hizo faena al final Juan porque ese toro duraba más que los conejitos de las pilas, y eso, para mí, es signo de raza y bravura. Lo que pasa, es que a algunos les jode que ese toro llevara el hierro de Domingo Hernández, y, repito, jode, dar algo al ganadero que sólo busca mosquitas muertas para los estetas del toreo actual. Pero, según estudié en la Universidad, la justicia es dar a cada uno lo suyo. Y ese toro recibió, se movió, y tuvo más raza que lo que era lo suyo. Y opino que son esas cosas las que hay que premiar. Y de remate, tanto Olivito, sexto de Miura, como Caracorta, sexto de Dolores, le seguían en mi orden de preferencia al premio Carriquiri.
Y dejar claro que las opiniones son como los ombligos, todos tenemos una y mucha gente no sabe para qué sirven. Y que la mía es mía, y propia, con criterio de alguien que estudia, escucha, discrepa, discierne, lee, aprende, y busca saber algo de este rito que cada día veo más lejano, y me parece ser más ignorante para alcanzarlo. Y que me hace gracia que haya personas que critican todo lo que se menea y no acepta que se les critique a ellos, o la autocrítica la tienen como palabro de diccionario desconocido. A esos, toda la caña del mundo es poca.
Y termino el tema de premios, que están muy bien, porque aquí son de verdad, ya que un premio significa repetir, o tener dos tardes. Y porque está muy bien recibir honores cuando se merecen. Y es grande reconocer el esfuerzo y la labor de todas las personas. Por eso mi ¡enhorabuena más sincera a todos los premiados! Seguro que se lo han merecido. Y reconocer a todos los que no han sido premiados y han estado bien en su labor, y la lista, desde pastores, trabajadores de plaza, conserje, corrales, toreros, picadores, médicos, cruz roja, matadores, mulilleros, al gran Paquito, el mayordomo de la plaza, y a tanta y tanta gente buena que hace que esta feria siga al frente de todas.
Gracias a todos por unos fríos, cansados y hermosos Sanfermines. El próximo año seguiremos preparando unos Sanfermines de altura, e intentaremos ser un poco menos torpes y estar siempre por encima.
YFM!!!!