Muchos son la gente del toro que nos han llamado para poder estar con ellos, y accesibles estarán para ello. Aprovecharán para visitar los toros seleccionados para los Sanfermines. Intentarán cerrar los puestos de las figuras, lo primero. Volverán a intentar contratar a Morante, si el listo de su apoderado deja de poner pegas y miedos. Y procurarán este año, ya que el anterior no se pudo, dejar todo más o menos cerrado en apenas cuatro días. Y es de ley contar y decir que el esfuerzo sale de su bolsillo, de su tiempo quitado a sus negocios, de su afición y querer a una casa, a una fundación. Luego lo harán mejor o peor, pero vaya por delante el reconocimiento a una labor altruista que a veces nos frena en el discurso crítico a sus errores. Porque humanos son, pero más que la mayoría de los empresarios del planeta toros. Así que seguro esperarán a Madrid para ver quién suelta el aldabonazo.
Ahora a Sevilla. esta tarde en sus entradas pagadas del tendido, que los verán, porque seguro que Molés los buscará, querrá llevarlos a palcos pluseros y tertulias. Y saben que alguna tendrán que tragar. Pero no es lo suyo. Lo de ellos es ir a buscar los señores que tengan lo que hay que tener para lidiar los bureles pamploneses.
Este año estas fotos se repetirán, por dos veces, con los mismos personajes, al tener que recoger los premiso de Feria del Toro y el Carriquiri al toro más bravo por aquel hermoso Tramposo.
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