lunes, 19 de septiembre de 2011

Fuente Ymbro: En la cresta del torismo



En el primer lustro de la década de los noventa, un hombre con negocios en el mundo del mueble andaba con la idea de hacerse ganadero de bravo. Para finales de ese lustro tenía Fuente Ymbro, un terreno de unos trescientas hectáreas, donde pastaba ganado morucho dándole aprovechamiento al gasto que acumulaba la finca. Su nombre Ricardo Gallardo, hombre cabal, adusto, serio y muy aficionado.

Veces y veces, en charlas con este hombre, siempre tenía claro lo que quería hacer, lo que buscaba. Argumentaba la bondad del ganado ideado por Juan Pedro Domecq y Díez, y continúa haciéndolo, como un ganado que puede dar muchas variables y posibilidades. Además, si hablan con él escucharán las alabanzas hacia lo que considera, uno de los mejores alquimistas-ganaderos de la historia. Y, ¡ojo! Debe ser así. Porque casi el setenta por ciento de lo que se lidia viene de esa rama. Y es que hacia ese tipo de ganado se han tirado multitud de ganaderos que tenían otros orígenes, apremiados por los gustos estéticos de toreros y públicos. Ellos sabrán. Toda persona capaz de ser ganadera de bravo me merece todos mis respetos. Lidie o no. Sea de primera, o para las calles. Sólo por mantener viva esta raza bovina debemos declararnos seguidores de ellos. Luego, claro está, como humanos, acertamos más o menos, tenemos más o menos posibles, o lidiamos mejor o peor entre bambalinas. Y eso nos deja expuestos a la crítica del aficionado.

Cuando lidiaba novilladas con éxito, con varios indultos de sus utreros, discutíamos cuando nos juntábamos sobre tipos de ganado, sobre toros, sobre lo que fuere. Y, no sé si le sentaba bien o mal, pero en nuestras charlas le comentaba que para mí, él era más aficionado que ganadero, y eso podía tener complicaciones para su ganado. Mi intención, al decirle estas cosas, era explicarle que, como aficionado, debiera pensar en el toro, criar un animal que diese interés y emoción al público, pero que como ganadero debiera plegarse a las cuitas del taurinismo. Por aquel entonces, un propio era el h.p. navarro de la COPE, casa en la que estuve hasta el 2.006. Las charlas en Jerez, o en Fuente Ymbro no tenían desperdicio. Eran enriquecedoras. Algunas cenas en la caseta 7 de Julio en la Feria de Jerez, inolvidables. Nos daban las mil y una tomando copas, y charlando de toros sin parar. ¡Qué tiempos aquellos en casa de nuestro amigo Pepe!



Luego, empezaron las lidias de sus toros, ya definitivamente abandonando las novilladas como centro de sus esfuerzos. Por esos días, sus toros daban triunfo, gloria, indultos, al ganadero, que le apodaban Jandilla 2, cuando hasta en público Gallardo ha repetido que no es así, que él debe ser Jandilla 22 ó 23. Y en cierto modo, así es, ya que muchas ganaderías y proyectos con este ganado han salido antes que el suyo. Los toreros que lidiaban aquellas dichas eran todos de primera línea.

Había comprado la finca de al lado, en los noventa, llamada Los Romerales, y enajenado la mayor parte de Fuente Ymbro, como terreno. Como ganado Fuente Ymbro crecía exponencialmente. Con cerca de ochenta sementales, por entonces, que compartían los 'proyectos jandilla' el número de vacas aprobadas, y el número de chotos crecían y crecían dando complicaciones en los terruños duros y complicados de esas fincas. Vacas, chotos, añojos y erales seguían su curso en la finca de Chiclana, y también, algunos, en Los Quintos pacenses. Gastos sin fin para poner en orden una tierra quebrada, que han terminado por ser unas instalaciones modélicas en una forma de entender el toro moderno y adecuarse a las normativas europeas continuas sobre saneamientos y sanidad animal. Un buen mayoral a cargo de todo, poniendo en práctica ideas antiguas renovadas. Esa casa fue la primera en abrir una de las últimas cajas de truenos taúricos, con el tema de las fundas.

Las últimas seis temporadas, subiendo el nivel, creyendo en el toro, han dado mucha razón a la forma de pensar y ser de ese aficionado cabal, actual ganadero de éxito. Un lunar en el camino, Las Ventas. Y parece que para regocijo de mucha gente. - Para que se le bajen los humos, con eso de sacar un toro-toro y mira que fiasco - se ha oído decir entre el taurinismo. ¡Qué pena!
Y así, entre las muchas posibilidades que da el encaste que maneja, increíble para muchos, nada extraño antaño, ha buscado un toro que guste al público, con presencia, trapío, cara. E inversamente proporcional está siendo el gusto del aficionado por este toro, como el de las figuras por rechazarlo. Y está claro, que en una camada larga, hay toros de todo tipo, y que encima, las plazas de toros, mejor dicho, los empresarios que las conducen, buscan un toro acorde a su categoría y a lo que las figuras, o los toreros de segunda fila, piden. Ahí está el cáncer. Aunque tenemos que entender que el toro de Madrid no puede ser el mismo que vaya a Los Barrios, tampoco es entendible que localidades como Azpeitia, Tafalla o Cenicientos cuenten con toros de mayor cuajo y cara que Jerez o El Puerto. Explicable sí lo es, porque así gusta a ese aficionado y así los buscan las comisiones y empresas que llevan esos ruedos. Pero no tiene lógica que un coso de treinta y tantos metros de diámetro lleve mayor volumen que uno de sesenta con tres y cuatro veces más de capacidad. Y lo malo es que ocurre.
Y no olvidar el tema de las figuras. Ellas, todas juntitas, son las que rematan ferias, suenan a los públicos, mayoría en las gradas, y en teoría los que pueden con todo, a parte de cobrar acorde a su caché ganado en la arena, o en los despachos.
Los toros de Ricardo Gallardo son los rechazados por las figuras, y para muestra un botón. El ganadero tenía guardado un lote para ir al Puerto, y a última hora no fueron porque según la empresa los toreros no se habían puesto de acuerdo y se había contratado esos toros para los de primera fila, por lo que no fueron de la partida 2.011. Según el ganadero, dicho en directo en COPE Jerez ante los micrófonos del programa de Manolo Sotelino, la empresa mentía. Él vende toros, y en este caso, cuando los 'serolos' le preguntaron por quienes quería en el cartel, su adusta respuesta fue que le daba igual, como si ponía a su sobrino a matar a los seis. Que él es ganadero y vende toros, no coloca ganado para nadie. Y que El Puerto le había dejado tirado a él y a los aficionados, porque tenía una buena corrida preparada. Y ese era el problema, la diferencia en hechuras de lo que él iba a llevar respecto al resto. Y eso, que tienen el mismo origen, en teoría.
El caso, es que estos últimos años, con la ganadería cuajada en hechuras y caras, como gustan a su dueño, con picante y ritmo, toros que hay que domeñar con oficio y saber, donde aparece este ganado, deja chico al resto. Luego saldrá lo que tenga que salir, pero en hechuras y caras, ganan de largo. Y esto, hasta en Pamplona y Bilbao.
Y la demostración de lo que ocurre hace unos años, es que ya no se acercan ni apoderados, ni veedores de toreros para poner a sus 'porcelanas' con este hierro. Ya nadie mira, ni elige, ni siquiera busca. - ¿Cómo son los toros Don Ricardo? - Con buenas hechuras y caras, fulano, lo que los aficionados quieren en esta plaza - responde él. Y esa es la dicotomía. La contradicción, si quieren. Los gustos del aficionado no son los de los taurinos implicado. Y eso me dice que las 'figuras' no quieren complacer al aficionado, siempre en minoría.


Y ayer lo vimos en Nimes. Tranco, motor, picante, complicaciones, noblezas, bondades, durezas.... porque hubo de todo, pero con un mismo componente, transmitieron al público, y eso hay que estar en la plaza para sentirlo. Por la tele es complicado, aunque se puede llegar, a momentos, a esa dimensión. Hechuras preparadas, por encima del resto de la feria de la Vendimia. Y de cornucopia, de escándalo comparado con el resto. Y de esto tiene mucha culpa la idea del ganadero, que no cambia, aunque vea huir a sus toreros de antaño. Y, aunque no se lo crean, el tema de los pitones de esa largura, dentro de este encaste de toro astigordo, lo da la funda. El condón de los c... que tan tratado está como fraudulento, hace en el caso de Fuente Ymbro y sus duros y ásperos cercados, que el toro no pierda de cinco a siete centímetros en roces y desgastes. Y salen de tal guisa, casi todos, porque los romos, igual que los que son más chicos, no cambian su aspecto ni por colocar fundas, ni por darles de comer más. Esos irán a plazas de tercera, acorde a ello. Y por asuntos como el de ayer, es por lo que, los toreros dicen que ahora se afilan los toros, muchos ganaderos rivales que eso es jugar con las cartas marcadas, y el público en general que no sabe qué decir.
A mí, personalmente, me interesa saber más la opinión de los taurinos, de los aficionados, pero vaya por delante que ya me da igual que me digan que si ya no soy de Cebada, que si ya no soy de Dolores ni de Miura, que si soy de Fuente Ymbro. Yo sé de lo que no soy, y hoy por hoy, seguir a esta ganadería es acertar. Aunque no vayan toreros a la altura de sus toros. Aunque ayer, salvando la distancia del torpe Tejela, que le supera este ganado por la derecha y por la izquierda, por arriba y por abajo, Aguilar y Mora, Alberto y David, estuvieron hechos unos tíos, demostrando quienes pueden con lo que hay. Ambos diestros, hasta hace nada, se han comido camadas de cebadas, doloresaguirres y demás ganados despreciados por las presuntas figuras. Y es que, a partir de ahora, cuando un presunto quiera hacer un esfuerzo se apuntará a una de Fuente Ymbro, como gran logro. Y si no, al tiempo.


3 comentarios:

  1. Vale,estupendo,que gran ganadero es Don Ricardo,y que bien lo adulas. Me temo que no diras nada de Sanguesa,que ha hechado una feria muy interesante. Lo triste, es que tanta "amistad" con tanto ganadero y demas te quita "critica" y mucha,que ya lo hemos comprobado. Poco interes le veo a tu blog pasado San Fermin.
    J.Zubillaga

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  2. Pues a mi me parece un artículo muy interesante, creo que es un buen acierto todo lo que dices de Fuente Ymbro, y resaltar que este año es de las mejores camadas de Ricardo si no la mejor junto a la de 2007.
    Enhorabuena ganadero y ya estoy deseando verlos de nuevo en Pamplona y en otras muchas plazas.
    Saludos!

    Antonio

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  3. Zubillaga, yo no adulo a nadie. Menos a Gallardo, con quien seguiré peleando. Lo que pasa es que me parece interesantísimo que algo del llmado monoencaste esté en la otra trinchera.
    Respecto a lo de Sangüesa, no he estado. Si quieres clono crónicas de DN o DDN. No tengo problema. Pero igual no te gusta lo que allí se dice respecto a los toros presentados y las gradas abarrotadas¿?
    Y por último, estimo que puedas tener razón, y que después de sanfermines, tras 2 meses de convalecencia, 1 mes sin ordenador, no haya tenido nada que decir. Quizás esté vacío. Pero siempre me queda leer a mucha gente que tiene muchas cosas que decir en muchos bolgs. ¡Haz tú lo mismo!

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